Doula y Acompañanta de Abortos
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Métodos Seguros para Abortar
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce varios métodos seguros para interrumpir un embarazo, dependiendo de la semana de gestación, el contexto de salud y posibilidad económica, la decisión de quien va a interrumpir y el acceso a medicamentos o servicios médicos. Los métodos más comunes son:
Misoprostol Solo
📅 ¿Cuándo se recomienda?
Cuando no se tiene acceso a Mifepristona. Se puede usar desde la semana 6 hasta las 12 semanas (1er trimestre), y con supervisión en el 2º y 3° trimestre.
🩺 ¿En qué consiste?
Uso de pastillas de Misoprostol por vía sublingual, vaginal o bucal. Provoca contracciones uterinas y expulsión del contenido del útero.
✅ Efectividad
Su efectividad en embarazos hasta la semana 12 es del 85% al 90%

Mifepristona + Misoprostol
📅 ¿Cuándo se recomienda?
Método recomendado por la OMS, ya que es el método más efectivo y seguro no quirúrgico. Es el preferido por muchas personas porque es menos invasivo. Se usa de forma segura desde la semana 4 hasta las 12 en casa, y en el 2° y 3° trimestre con acompañamiento.
🩺 ¿En qué consiste?
Primero se toma Mifepristona (bloquea la hormona del embarazo). Después de 24-48 hrs se toma Misoprostol, que provoca contracciones y expulsión.
✅ Efectividad
En embarazos hasta la semana 12 es del 95% al 99% mientras que en abortos arriba de la semana 13, suelen hacer que se expulse más rápido.

Letrozol* + Misoprostol
📅 ¿Cuándo se recomienda?
Alternativa en países y lugares donde no hay acceso a Mifepristona o está restringida. Actualmente se encuentra en investigación, pero cada vez más utilizado de forma segura hasta las 12 semanas.
🩺 ¿En qué consiste?
Se toma Letrozol por 3 días (bloquea estrógenos y prepara el útero), seguido por Misoprostol que induce contracciones y vaciado del útero.
✅ Efectividad
Se ha encontrado que en embarazos hasta la semana 12 es del 87–92%, un poco menos que Mife + Miso, pero mejor que Miso solo. Se usa más en países con restricciones a la Mifepristona.
*Importante: Aunque el Letrozol no figura aún en todas las guías oficiales, su uso está documentado en investigaciones y experiencias feministas. Siempre es recomendable acompañarse por alguien con experiencia.

Aspiración Manual o Eléctrica Endouterina (AMEU/AEE)
📅 ¿Cuándo se recomienda?
Hasta las 12-13 semanas de gestación. Es el método quirúrgico recomendado en el primer trimestre ya que es muy seguro y tiene pocos riesgos cuando es realizado por personal de la salud capacitado.
🩺 ¿En qué consiste?
Se dilata ligeramente el cuello uterino y se inserta una cánula conectada a una jeringa que genera succión para vaciar el contenido uterino.
✅ Efectividad
Este método tiene una efectividad del 98-99%



Dilatación y Evacuación
📅 ¿Cuándo se recomienda?
En abortos de segundo trimestre, usualmente la semana depende del país y el contexto legal y/o médico.
🩺 ¿En qué consiste?
Se dilata el cuello uterino y se extrae el contenido del útero con instrumentos quirúrgicos y succión. Es más complejo que el AMEU.
✅ Efectividad
Está por arriba del 99% ya que es altamente efectivo cuando lo realiza personal capacitado en un entorno clínico adecuado.
Legrado Uterino (Curetaje)
🚫 ¿Por qué ya NO se recomienda?
Va contra las recomendaciones de la OMS y sugiere evitarlo si existen alternativas más seguras, ya que con este proceso existen más complicaciones y recuperación más lenta. Tales como: mayor riesgo de perforación uterina, riesgo de adherencias uterinas (síndrome de Asherman), las cuales puede dejar cicatrices internas que afectan la fertilidad y el ciclo menstrual.
🩺 ¿En qué consiste?
Es un procedimiento quirúrgico en el que se raspa manualmente el interior del útero con una herramienta metálica llamada cureta, para extraer su contenido (tejido del embarazo, restos placentarios, etc.).
❓Entonces, ¿por qué a veces el personal de salud lo siguen recomendando?
La mayoría de las veces es por una formación médica antigua ya que muchas veces se les enseñó en el momento en el que el legrado era el estándar y no se han actualizado. Por otro lado, algunas instituciones aún no han adoptado las guías más recientes de la OMS o ministerios de salud.



